domingo, 2 de diciembre de 2007

el recuerdo

a ti, que ya no estás

Te recuerdo,
y te siento
pasar tus manos
por mi espalda,
enrollando mi cabello
entre tus dedos.

Aún siento
ese dulce néctar
de tu boca, en la mía.

Soy otra,
siendo yo misma,
soy el viento
de aquella
fría mañana
¿la recuerdas?.

Soy las caricias
eternas que aún
llevo grabadas
en mi cuerpo.

Soy el tiempo
el que sin tí
se hace eterno.

Norelis Angélica

2 comentarios:

Darich dijo...

hola!
me gusto mucho ese poema...
te invito a mi blog y a la actividad que esta postiada en el blog, nos comunicamos...

Darich dijo...

bueno, gracias!
igual yo te seguiré leyendo...
srta.Norelis...
jeje no soy tan viejo para que me digas Señor... jeje


"la conciencia nos condena y

nos declara la muerte en vida,

se me hace eterna la muerte,

pues aun en mi labios saboreo

el dulce sabor de tu boca."